Aumentan día tras días los contenidos online; las empresas apuestan por este atractivo método, que les da reputación y constituye una eficaz herramienta de marketing. Pero atención: para redactar y subir un texto, no basta con seguir la inspiración del momento.  La redacción de contenido para webs responde a unas reglas. Lo que sucede es que hay tantas, que a veces uno se pierde intentando encontrar el Santo Grial del texto perfecto.  Desde aquí hemos elaborado un pequeño, pero completo Kit, con los cinco puntos que sí o sí deben ser la base de cualquier contenido que vayas a subir a internet. ¿Cuáles son? A continuación, te los detallamos:

#1 Enamora a tu público: ya no sirve escribir como autómatas para rellenar espacios. La redacción tiene que responder a unos fines muy claros, y la mayoría de las veces ese objetivo es vender. Y para vender,  hay que atraer. Tienes que llegar al corazón de tu público y convencerlo: ya sea que compren un producto, un servicio, o que sigan navegando por tu web. Para lograr esto, el lenguaje que uses deberá estructurarse siempre alrededor del público al que se quiere llegar. Hay que tener en cuenta al interlocutor al que nos dirigimos, y adaptar el mensaje a sus necesidades.

#2 Viste correctamente tu texto (el sombrero en la cabeza y los zapatos en los pies): este es uno de los grandes secretos en la redacción de contenidos para empresas. No puedes colocar párrafos como si te pusieras  piezas de ropa, una sobre otra. Cada prenda va en un sitio ¿verdad? Algo parecido sucede cuando estás creando un contenido. Para ello, tienes que colocar en primer lugar las informaciones principales. ¿Por qué? Por dos razones; la primera, por los propios lectores. Hay que motivar en ellos las ganas de leer y para eso lo más llamativo son unos buenos títulos y una introducción. Pero también porque esta estructura ayuda a llamar la atención de los motores de búsqueda. ¿Cómo? Proponiéndoles títulos que les permiten una indexación cómoda de la página. Recuerda que el título principal aparece en la página de resultados de Google, así que es importante trabajarlo muy bien.

#3 “¿Lo bueno, si breve, dos veces bueno?” No siempre. Y es que éste es el escollo más grande con el que se encuentran muchos de los que se ponen a escribir un texto. Primero, hay que lidiar con la dichosa “página en blanco”. Una vez superada esta primera fase, y ya definido el mensaje que quieres transmitir, viene la siguiente pregunta: ¿Cuánto escribo? Y es que el famoso dicho “Lo bueno, si breve, dos veces bueno” no sirve para el lector digital.

Seguramente has oído hablar del análisis elaborado por Brian Dean, fundador del blog Backlinko y experto en SEO. Según Dean, los artículos que aparecen en los diez primeros lugares en los resultados de Google, tienen una media de 1.447 palabras. Así pues, no condiciones la extensión de tu escrito a un número de palabras, aunque sí debes tener en cuenta el tema que tratas y el objetivo que persigues: por ejemplo, 300 o 400 palabras para responder una pregunta es algo muy usual. Pero recuerda que contenidos con 1.500 e incluso 2.000 palabras contribuirán a mostrar tu dominio sobre un tema concreto.

#4 Dale visibilidad en la red: la redacción de contenido no busca solo el informar o convencer, también se necesita visibilizar las páginas de una manera natural. Esto es indispensable si queremos posicionar nuestra web en los primeros resultados de los motores de búsqueda. ¿Cómo lograr que nuestros contenidos sean visibles y la web genere tráfico?

  • Elección de palabras clave: allegro ma non troppo, en este caso sería elegir un número de palabras clave suficientes, pero que no saturen el texto. Palabras, además que tengan un amplio significado popular (conocidas por el público en general), pero al mismo tiempo, que no se hagan competencia entre ellas.
  • También hay que tener en cuenta junto a estas  key words, a la familia completa. Es decir, el campo semántico, o aquel grupo de términos relacionados, o alrededor de las cuales puede girar nuestra palabra clave. Si estamos trabajando una web sobre el Salón del Automóvil, por ejemplo, habrá que utilizar términos como coches, mecánico, ruedas, vehículo, etc…

#5 Use it or lose it (Comparte, en pocas palabras): ¿Recuerdas nuestro anterior post del Ferrari olvidado en el garaje? Eso es lo que sucedería si escribes un artículo magnífico, pero no lo compartes de la manera correcta. Sal con el texto debajo del brazo a buscar a tus lectores: difunde tus contenidos entre tu entorno más próximo y tus clientes. Escoge y trabaja con la red(es) social(es) que prefieras, pero divulga continuamente. Como bien dicen los anglosajones… Use it or lose it.

Estos cinco aspectos representan los pilares sobre los que debe sostenerse el contenido en internet. Cinco reglas muy sencillas que deberás poner en marcha si quieres crear contenido que se lea, y una comunidad fiel de seguidores. Anímate a ponerlas en práctica tú mismo/a, o si lo prefieres, contrata los servicios de un profesional, y lograrás que tus textos cobren vida propia en Internet.